[26 octubre 2022]


Azara García de los Salmones: "El Trail Running me devolvió la motivación por el atletismo"


Por: Vicente Capitán


La cántabra Azara García (18-6-83), será una de nuestras ilustres veteranas en el Mundial de Tailandia, al que llega como una referencia universal en el ámbito del Ultra Trail Running, ya que sus éxitos en carreras míticas de la ultra distancia son numerosos. Azara ya fue subcampeona del Mundo de Trail Running en 2016 y cuarta en 2019.

Esta mujer es, como otras componentes de la actual selección española de Trail Running, una deportista que se fajó en el atletismo tradicional de pista y cross cuando era niña. "Empecé con ocho años en la escuela de atletismo de mi pueblo, en Corrales de Buelna y antes recuerdo que el profesor de educación física nos dijo un día en clase que hacían unas competiciones en el municipio que se llamaban "Buscando Atletas". Allí íbamos muchos niños del municipio a hacer unas pruebas y eso me enganchó al club, creo que gané y eran unas pruebas combinadas con salto de longitud, velocidad y una vuelta a la pista".

Récord de Cantabria alevín de 1.000 metros: 3:11

Azara era una niña muy activa y se le daba bien el atletismo "recuerdo de aquellos inicios como alevín de segundo año, con 11 años, que gané el campeonato de Cantabria de 1.000 metros y batí el récord con 3:11… esa carrera no se me olvida nunca". Si uno tiene curiosidad, en su página web: www.azaragarcia.es puede disfrutar con algunos vídeos de carreras de sus inicios.

También hacía cross, pero reconoce que le gustaba más la pista, y a nivel nacional sus primeros campeonatos de España fueron como cadete en el campo a través, representando a su comunidad cántabra, con compañeras como Margarita Fuentes Pila. También fue a algún campeonato de España en pista por Federaciones Autonómicas, pero no recuerda que estuviera en un Nacional individual sobre el tartán. Para resumir aquella época, Azara rendía bien a nivel regional, pero no destacaba a nivel nacional.

El parón y regreso tras su maternidad a los 23 años

"Podríamos decir que cuando era sub20 y el inicio como sub23 yo entrenaba muy bien, pero luego los resultados no me salían como esperaba, y poco a poco te vas desilusionando. Luego, además, yo fui mamá muy joven, con 23 años en 2007 nació mi hijo Miguel, y tuve ahí un parón importante, y después busqué hacer atletismo para estar a gusto, ponerme en forma poco a poco, pero no pensaba tanto en la competición. Pero curiosamente, me empezaron a salir marcas mejores de las que había hecho hasta entonces… poco a poco me metí más en ruta, corrí en 35 y pico en la San Silvestre Vallecana, 1h19 en una media maratón durísima en Galicia y me fui animando. Yo había entrenado en mis inicios con Enrique Sáinz y Antonio Vallejo, este corría muy bien los 800 recuerdo, luego con Víctor Ruiz Cueli y al final con Juan Carlos Llamas. Juan Carlos es nutricionista y empecé con él por temas nutricionales, pero me quedé sin entrenador y me empezó a entrenar él… así hasta el año pasado que inicié mi etapa con Rafa Flores"


Kilómetro Vertical de Fuente Dé y su idilio con el Trail Running

Tras su regreso poco a poco tras ser mamá, ya hemos señalado que llegó un momento de desilusión hacia 2009 y 2010, un período en el que Azara había perdido la ilusión por su deporte. Entonces alguien le habló del kilómetro vertical de Fuente Dé "y allí me presenté, por supuesto sin preparar nada específico y sin saber lo que me iba a encontrar, recuerdo que el día antes en la zona, pregunté por dónde era el recorrido y me decían 'por ahí y hasta arriba' y claro yo venía de un atletismo con todo señalizado y ahí había un camino y nada más. Luego, en carrera cuando empezamos, pensaba 'esta gente está loca, cómo pueden ir por aquí". El caso es que Azara ganó la carrera y quedó prendada de las carreras de montaña y posteriormente con el Trail Running de larga distancia. Para ella fue fundamental, que a diferencia de la pista o la ruta "aquí no había presión de tiempos, de crono, y eso me liberó mucho, fui disfrutando exprimiéndome al máximo, sin más".

A partir de entonces empezó a diseñar un calendario con carreras muy cortitas por la zona, tipo Trail Costa Quebrada, alguno por el País Vasco, pero siempre que no fueran muy largos y también hacía carreras verticales. Esto lo combinó con el atletismo de siempre, pero en 2013 fue cuando contactó con Juan Carlos Llamas, su nutricionista. "Tenía problemas de retención y de este modo empecé a ver un calendario un poco más nacional en montaña. Lo hice muy bien en la Subida al Puig Campana, estando muchas de las mejores especialistas y a partir de ahí empecé a entrenar con él y entrenarme ya por montaña de verdad, porque yo iba a carreras de trail running pero sin entrenar específico".

Primeras medallas nacionales y subcampeona del Mundo de Trail Running

En 2016 Azara descubrió que la RFEA hacía selección para los novedosos, entonces, Mundiales de Trail Running. Azara ya había hecho un maratón en 2014 y en 2015 se dio el lujo de ganar nada menos que en Zegama-Aizkorri, cuando apenas tenía experiencia en esas distancias. "Ya el hecho de correr allí era un reto para mí, y encima gané, cuando un año antes yo había rechazado ir a correr allí porque veía que eso no era para mí, no me veía preparada para competir esa carrera, hasta que el año anterior acabé cuarta en mi debut en maratón en Chamonix, por delante de gente como Maite Mayora. A partir de Zegama es cierto que abrí la mente para empezar a competir más fuera, en el extranjero".

Su estreno en los campeonatos de España y en un ultra, aunque fuera corto, fue en los 66 km de Reventón Trail, que fue campeonato de España en 2016. La competición sirvió para hacer la selección para el Mundial de Trail Running.

Azara inició su idilio con la carrera palmera, ganó aquel campeonato y se ganó el billete para el Mundial, "y viví entonces mi mejor año deportivo, el más completo y el de más éxitos con diferencia. El Mundial eran 80 km y la carrera fue la bomba, porque pese a que tuve una caída muy importante, y me hice una herida importante en la espinilla, pude seguir en carrera y tuve una pelea tremenda con Ragna Debats, la holandesa afincada en España… íbamos pegadas y pude acabar subcampeona del Mundo y encima plata por equipos, no me lo creía… me dijeron además que había ganado Luis Alberto en chicos, fue tremendo".

Lesión grave en 2017

2017 arrancó muy bien para ella, con su primera carrera por encima de los 100 km en Transgrancanaria, con victoria, pero después "empecé a arrastrarme poco a poco en las siguientes carreras, me había desgastado mucho con aquella preparación seguramente, fuimos parcheando las molestias en isquios y otras zonas, pero lo fui salvando sin curar del todo y en el Mundial de Italia, me rompí… y el tema fue grave porque fue una rotura del tendón del semimembranoso, casi total. Me lo pintaron muy mal, estuve en contacto con los mejores médicos que conocía para ello, pero nadie apostaba mucho por mi recuperación para volver a competir al máximo nivel".

Aquello marcó una época dura para Azara, que decidió no operarse e inició tratamiento con factores de crecimiento, con otros tratamientos de última generación y con atención de fisioterapia diaria. "Y conseguí salir adelante, recuerdo que el doctor López Carro me pidió autorización para usar mi caso en congresos, porque él alucinaba sobre mi recuperación… y pude volver a competir como antes".

Tras seis meses sin competir, Azara reapareció en la Maratón del Hierro, en febrero de 2018, en el que ganó la carrera, batió el récord y ni se había vuelto a acordar de la pierna. "Fue un chute de motivación tras los meses pasados". Ese año el Mundial recaía en Penyagolosa y nuestra protagonista se ganó el billete para el mismo al correr la Transgrancanaria Advance (poco más de 60 km) en marzo y acabar tercera. "Iba bien, pero andaba con problemas de estómago, no sabían lo que me pasaba, porque me levantaba hinchada y en el Mundial me tuve que retirar en el km 63, fue un palo para mí. Nunca me supieron decir qué me pasaba, quité el edulcorante líquido porque antes abusaba de ello y me fue bien, aunque aún hoy en día, alguna vez tengo esa sensación de entonces".

Azara García, de acuerdo con su marido, Álvaro, decidió apostar todo por el Trail Running como deportista profesional a partir de 2017, sobre todo a raíz de la lesión grave en la zona de los isquiotibiales. Tenía la beca por la plata con la RFEA y podía tirar para adelante, gracias también a sus patrocinios y el esfuerzo de su marido: "Me centré en mi trabajo como corredora, dejé la fábrica en la que estaba empleada y sí que mantuve los entrenamientos que como monitora hacía en el Club Atlético José Peña Lastras, en el que yo empecé y donde llevo mucho tiempo entrenando a los niños".

"Tras el Mundial, pude sacarme la espina en julio en la ultra Blue Trail de Tenerife, y gané, luego el campeonato de Cantabria, el Desafío de Somiedo y el Ultra de La Covatilla. Rematé en octubre con el Festival de Templier, en Millau (Francia), una carrera de enorme nivel, con, por ejemplo, toda la selección francesa que estuvo en Penyagolosa. Son 77 km por un trazado muy de correr, me dio unos consejos Miguel Heras, que ya había estado, esperé a la parte final que es donde se acumulaban los más de 3.000 metros de desnivel y gané corriendo muy bien"

Vuelven los éxitos en 2019

Nos vamos a 2019, cuando Azara ganó a finales del año anterior en la Falco Trail el campeonato de España de Trail Running y en marzo triunfó primero en Reventón Trail y dos semanas después, en el primer campeonato de España de Trail por Federaciones Autonómicas, en Cehegín (Murcia). Ese año tocaba Mundial en Portugal, pero poco antes del mismo, desde la RFEA la llamaron porque sus analíticas estaban muy mal, su hematocrito estaba en 36, un valor bajísimo por lo que tuvo que levantar el pie en la preparación final para el Mundial, con bajo impacto, recuperación, etc. "Me encontraba cansada ese último mes y bueno, el Mundial lo hice bien, peleé viendo a Sheila por atrás, estuve luchando mucho y me tuve que conformar con la cuarta plaza, que al principio sabe mal, pero por equipos fuimos subcampeonas del Mundo y con eso hay que quedarse".

Azara pudo entrenar bastante bien durante la pandemia, gracias a una cinta de correr que le dejaron antes de confinarnos. Justo antes de ese momento, Azara había vuelto a ganar en Transgrancanaria su distancia larga de 128 km y como su actitud mental fue buena, "me tomé el tema como una lesión y seguí motivada para hacer lo que podía. Cuando nos dejaron salir y competir me vi bien. Me fui a Suecia a correr una prueba de las Spartan y gané con récord acabando novena de la general. En septiembre hice alguna carrera corta de 21 km y allí acabé tras Ainhoa Sanz y Oihana Kortazar".

Buen 2021 que acaba con lesión y cambio de entrenador en 2022

Ya en 2021 Azara volvió a ganar su querida Transgrancanaria, en abril hizo lo propio en el Ultra de Sierra Nevada, también ganó en Formentera y luego, en Lavaredo (Italia), acabó cuarta con problemas en una rodilla, llegando prácticamente coja a meta. Esto fue en el mes de junio. "Tuve que parar y tratarlo, me recuperé bien y fui a las 100 Millas del Oso, en Asturias, gané, pero volví a tener problemas en la rodilla. Y luego fui a Ultrapirineu y ahí seguí con problemas, pero ya sabes, tiras, intentas seguir…". Le preguntamos a la cántabra por esa capacidad para acumular tantas competiciones tan largas y ella misma no sabe explicarnos cómo lo hace… "no todas son de más de 100 km", nos dice, mientras nos reímos un poco. "Igual por el calendario sí nos dejamos llevar y abusamos un poco de los ultras que se hacen, porque además, se hacen cada vez más rápido. No obstante, ahora con Rafa Flores, ya sé que no voy a correr todo lo que querría y lo haré menos".


El peaje de aquella carrera de Ultrapirineu le ha obligado a pasar por el quirófano al inicio de este 2022, problemas en la cintilla iliotibial que ha tenido que solucionar con cirugía. De este modo, las fechas para poder meterse en el equipo para el Mundial de Tailandia, empezaban a ser limitadas para ella. "Me recuperé bien y justo en ese periodo empecé con mi nuevo entrenador. Llegué a plantearme con dos semanas de entrenamiento suave, presentarme en el primer campeonato de España de Ultra en Penyagolosa, pero Rafa me frenó y evidentemente habría sido una locura. Por ello hemos ido sin mirar demasiado el calendario, íbamos en función de la evolución y a finales de mayo empezamos a competir algo. Fui al Desafío Somiedo, lo hice bien y no me había dolido nada, eran más de 50 km y estaba feliz. Desde ahí tenía claro ir a la Blue Trail, hubo un problema y tuve la opción de ir a Francia a una carrera de 52 km y todo fue genial. Corrí de menos a más, cosa que yo no hacía antes y a finales de mes nos fuimos a la Mozart Trail de más de 100 km y aquello fue fenomenal, luego tenía intención de debutar en la 100 Millas de UTMB y antes a finales de julio tuve la opción de ir al Campeonato de Rumanía, un buen Trail en Bucovina y gané con muy buenas sensaciones. En UTMB no fue bien, ni piernas ni estómago y pasado el km 80, para casa".

Finalmente Azara entró en la lista para el Mundial, un perfil que en teoría le viene bien: "Ha sido un mes un poco raro por algún inconveniente, en concreto con un tratamiento de fisioterapia que me hizo daño, pero hemos adaptado los entrenamientos a ello y ya está. El perfil de Tailandia, a priori, me viene bien y lo que nos han contado, pues igualmente me va bien, porque no es un recorrido muy técnico. Estoy ahora en una fase nueva de adaptación a estos entrenamientos, porque me he dado cuenta que entrenando muchísimo menos estoy igual o mejor que antes haciendo mucho más. Ha sido para mí un cambio brutal, y creo que llego mucho más entera y fresca a la competición. Trabajamos entrenos cruzado con bici, cosa que antes no hacía así y hacemos un par de días de fuerza tanto en gimnasio como con lastres, tiradas largas los fines de semana con acumulación de desnivel y calidad otros dos días a la semana".

Por último, Azara García, a sus 39 años quiere poner en valor el gran equipo femenino que lleva España en su distancia ultra: "Tenemos un equipazo, bueno nunca se sabe al ser carreras de tanto tiempo, pero, a priori, yo diría que tenemos que estar luchando por el título sí o sí. Las compañeras que tengo son para ello, sin ninguna duda". Las mujeres que forman el conjunto de esta especialidad junto a Azara son: Mónica Vives, Maite Mayora, Marta Molist y Gemma Arenas.