[10 octubre 2022]


Zaid Ait Malek: "Estoy muy feliz en España, por fin la vida nos trata bien"


Por: Vicente Capitán


Zaid Ait Malek es un tipo afable, de hablar reposado, del que físicamente sobresale su poblada melena que corona su cuerpo menudo, y que nos recuerda al gran violinista armenio afincado en España, Ara Malikian. Nacido en las montañas del Atlas marroquí el 1 de enero de 1984, se crió jugando en el campo, ayudando a sus padres y hermanos con los trabajos en el campo y criando cabras, por lo que, para él, ser un chaval activo con el añadido de hacerlo en altitud es algo cotidiano. "Era mi forma de jugar y cuando tenía vacaciones me gustaba ayudarles con el ganado, jugaba mucho con los cabritos. Mi pueblo es Oudaddi, de apenas 60 habitantes, a ocho kilómetros de Imilchil, que ya es un pueblo grande. Esa zona está a casi 2.200 metros de altitud, pero mis padres se movían de un sitio a otro con el ganado, por lo que yo nací en un lugar a 3.000 metros".

Pero tal y como nos cuenta, no era corredor, vamos que no competía en atletismo, a él lo que le gustaba era el fútbol. "Si que recuerdo que hice algunas carreras en el colegio, esas se me daban bien y luego te clasificabas para correr contra otros colegios y después para hacer alguna competición regional… pero yo más allá ya no iba, sobre todo porque serán las familias las que tenían que costear el viaje y demás, y mis padres no podían, nosotros éramos muy humildes. Pero lo que más hacía era jugar al fútbol, que me encantaba".

Zaid era buen estudiante, y tras el colegio y aparte de ayudar a sus padres, empezó estudios superiores en Matemáticas, pero rápido intentó buscarse la vida trabajando para llevar dinero a casa y poder tener para sus cosas, porque en casa no había dinero para caprichos. Y aunque su padre quería que siguiese estudiando, cuando llevó aquellos primeros dineros, "le demostré que podía ganar dinero, empecé a trabajar un verano y ya no seguí estudiando. Fue desde 2002 al 2006 y acabé siendo encargado en una empresa de grúas y productos de la construcción, en pocos años no tenía nadie que me mandara, era yo el que jefe".

La aventura de pasar la frontera y primeros años en Níjar (Almería)
"Pero aquel 2006 un primo y un hermano que trabajaban conmigo querían ir a Tánger para pasar la frontera a España y ellos me fueron liando, decían que como yo era muy ligero podría pasar la frontera en los bajos de un camión y hablaban de que en España iba a estar mejor, ganar más dinero, ya sabes. Fue a finales de diciembre de aquel 2006 cuando fui con ellos a Tánger a ver qué hacían, iba sólo a ver cómo lo iban a intentar sin más, pero al ver a la gente cómo lo hacía, tiré para delante y me metí con mi primo debajo de un camión, sin pensar más"

Zaid salió airoso de aquella aventura vital, cruzó la frontera y llegó Algeciras "no tenía miedo de que me pillasen ni nada de eso y me salió a la primera que es algo muy raro. Tenía dos teléfonos de amigos que habían cruzado hacía seis meses. La policía pilló a mi primo y yo llegué sólo. Me crucé con un paisano que hablaba mi idioma, me dio desayunar y me dejó llamar a esos números, pero no estaban operativos, así que, a buscarme la vida. Otra persona me llevó a Almería porque allí había muchos compatriotas y trabajo en los invernaderos y allí llegué y estuve viviendo cuatro años"

Ait Malek se ganaba la vida como otros muchos inmigrantes subsaharianos y marroquíes, recogiendo la fruta y verdura de temporada en aquellas tierras y recuerda que gracias a un paisano que era de muy cerca de su pueblo, se integró muy rápido en la comunidad. La localidad en la que se ubicó fue Níjar, "al principio trabajaba dos o tres días a la semana, los otros inmigrantes te ayudaban a las cosas cotidianas de la vida, al llevar más tiempo que tú", nos dice.

Y la cuestión es ¿cómo surge el Zaid Ait Malek atleta? "Lo que hacía de deporte al inicio fue jugar al fútbol, porque la gente del a Cruz Roja nos organizaban una especia de Copa África donde jugamos los de Nigeria, Senegal, Marruecos… y en aquel campeonato fui el más destacado, jugaba de lateral, me llamaban Ferrari por lo que corría y me fichó un equipo local de Níjar para que jugara la liga con ellos. Sólo jugaba en el pueblo, como no tenía papeles, no salía fuera a otros pueblos. Ahí veía a uno de nuestros preparadores que era marroquí y que corría, yo veía como se entrenaba y así empecé a correr, me dijo que estaba preparando una media maratón en Almería, me animé y con unas semanas de entrenamiento, él me apuntó y allí fui. Hice 1h26 y como casi no había entrenado, allí me contactaron otra gente para ofrecerme entrenar con ellos. Me ficharon del club Aqueatacamos, era el año 2008".

A Zaid le hicieron una tarjeta del club y como lo llevaba un policía de la zona, le dijo que con ese papel podría ir tranquilo por la calle, ya que su situación seguía siendo ilegal, pero así empezó a ir a carreras sin miedo. La primera competición que Zaid ganó fue una de 29 km, una prueba larga, por la montaña, sin experiencia "la gente hablaba de geles, y yo iba casi sin agua…" Fue la Carrera del Desierto de Tabernas. No había nada de dinero en aquellas primeras carreras en las que Zaid llegaba delante, "mi único objetivo era llevar una copa para casa, yo nunca pensaba en ganar dinero o dedicarme a ello como hago ahora".

Cambio de aires a Baena (Córdoba)
"En 2010 presenté papeles en Almería, me vendieron un contrato falso y no pude legalizar mi situación y por ello cambié de aires y un amigo me llevó a la temporada de aceituna a Córdoba. Me presentó a su jefe y gracias a él encontré trabajo estable y me enganchó además a varias carreras, porque él tenía papeles y coche y se podía mover con la libertad que yo no tenía. Es una de las personas que más me ha ayudado para poder ir a correr a pruebas fuera. Se llama Jilali, no era un buen corredor, digamos que se enganchó más a correr por mí".

Zaid se ubicó en Baena y la gente del club local, le ofrecieron poder compartir entrenar con ellos y además le acabaron ofreciendo un contrato para entrenar a niños, con el fin de ayudarle para regularizar su situación. "Fue un poco casualidad cómo les conocí, porque nos empezamos a ver corriendo por las calles. Recuerdo que una vez que llovía me pitó la policía por la calle, y yo creía que me querían parar por papeles o algo así. El que me paraba era policía local y había estado corriendo el día anterior conmigo, pero no lo reconocía al principio y así me ofreció ir a entrenar con ellos por las tardes a la pista. Me presentaron al presidente del club y me ayudaron mucho, dejé de tener miedo a salir a la calle. El club era el Media Legua Baena, aquel policía corredor era Andrés Ortiz y el presidente Jesús Morales".

De este modo Zaid empezó a integrarse más en el mundillo de las carreras populares y del atletismo en general. "Tenía ya permiso de residencia el club me ayudó incluso a buscar casa y recuerdo que me llevaron a hacer la Noche de San Antón, aquel 2010 fue Reyes Estévez, y llegué a nueve segundos de él y me acuerdo que los del club me decían que si sabía con quién había llegado, etc. Yo le había visto correr con El Guerrouj pero en la carrera no me di cuenta que iba a su lado. Aquello me dio un subidón".

Primera victoria en Trail Running en la Media Maratón Subbética
Para su llegada al Trail Running hay que esperar a finales de 2010 "cuando conocí a Carlos Chamorro que entrenaba a los niños del club y empecé a compartir esa tarea con él. Carlos era corredor de montaña y así empecé a ir a con él, recuerdo que fuimos a la Sierra Subbética de Córdoba y aquel día me emocioné porque aquello era como mi casa, me recordó a mi familia, mi pueblo, mis cabras… llevaba cinco años sin ir a mi tierra. Desde aquel día me propuse entrenar por aquellas montañas, sabía que ese era mi entorno natural. Carlos era un buen corredor a nivel regional y cuando me vio como subía y sobre todo como bajaba, me dijo que parecía una cabra y que tenía que competir ese tipo de carreras".

Su estreno llegó en 2011 en la Media Maratón Subbética que estaba dentro del calendario autonómico de Andalucía... Zaid salió como un loco los primeros cuatro kilómetros de llano, nadie daba un duro por él a ese ritmo de salida, y aunque sufrió algo más adelante, incluso al ir tan escapado se perdió en algún tramo, pero ganó sobradísimo con más de siete minutos de ventaja y ya todo el mundo empezó a hablar de él. Aquello le abrió las puertas del calendario de Trail Running que había por aquel entonces, iniciando sus primeros viajes con la selección andaluza.

A partir de ese momento se inició la posibilidad del trámite de la nacionalidad española, un trámite solicitado en 2014, que se perdió, incomprensiblemente, en los cajones de un despacho, por lo que Zaid pasó años sin ningún tipo de respuesta. "Recuerdo que uno de mis rivales aquellos años era Raúl García Castán, que era de los mejores a nivel mundial y pude ganarle alguna carrera". Zaid compaginó aquellos inicios como corredor de Trail Running con la recogida de las frutas de temporada, no era un trabajo fijo, pero no le faltaba.

"Mi amigo Carlos era profesor de educación física en un colegio y hacía intercambio con unos colegios de Cataluña, de forma que ellos venían aquí una semana y los andaluces iban a su tierra. Dio la casualidad de que, con el colegio catalán, una de las profesoras que venía era Nuria Burgada, la madre de Kilian Jornet. Carlos supo de ello y me presentó a Nuria y la llevó un día a correr a nuestras montañas para que me viera… recuerdo que Nuria dijo que le recordaba a su hijo por mi manera de bajar, y aquello para mí fue algo muy grande. Tras aquellos días de convivencia, Nuria y Kilian me ayudaron a tener un dorsal para la famosa Zegama Aizkorri al año siguiente, en mayo de 2013, y así me pude estrenar en aquella carrera, haciendo además una gran competición, acabando cuarto, pero peleando con los mejores hasta casi el final. La carrera la ganó Kilian y aquello me puso en el mapa mundial del Trail Running y desde ese momento ya empecé a ser conocido en todos lados. Hasta ese momento, aquello había sido el mayor regalo que yo había tenido en mi vida".

Dándose a conocer en el Trail Running mundial
Poco a poco empezó a ganar algo de dinero en las carreras, pero seguía trabajando a temporadas y ya en 2012 había podido estar dos meses con su familia en Marruecos. Regresó lleno de energía y centrado al 100x100 en el Trail Running. Malek seguía siendo un tipo autodidacta en cuanto a los entrenamientos, de hecho, la variedad de carreras que hacía era enorme, desde carreras verticales, a medias maratones, maratones, y poco después algún ultra. "Corría kilómetros por sensaciones, iba muchas veces sin reloj, podemos decir que lo que hacía es competir fin de semana y recuperar entre semana acumulando kilómetros, pero no muy fuertes. En 2014 tuve varias propuestas para entrenar con gente, pero no lo acepté, porque me conozco y no quería comprometerme con nadie".

Tras la mencionada carrera de Zegama, Zaid recibió la invitación de ir a Italia, a correr la Limone Xtreme, en cuya carrera se estableció un crono parcial en su tramo de bajada… y allí el atleta afincado en Baena realizó el mejor tiempo, por delante de los mejores especialistas del mundo. Aquellas carreras le llevaron a competir la Copa de Sky Running y nuestro protagonista fue capaz de ganar algunas prueba como en Zermatt (Suiza) y acabó subiendo al podio final junto a su admirado Jornet y al rumano Ionut Zinca.

Traslado a Cartagena, nuevo patrocinador y nacionalidad española
En 2018 descubrió la Cartagena Trail, patrocinado por "Jimbee", quien a la postre se ha convertido en su patrocinador principal. "Gané la carrera y el jefe de Jimbee y Jimbofresh, Miguel Ángel Jiménez, me llevó para que viera como trabajaban ellos la recogida de fruta, verdura, etc… y al saber mi historia de vida me preguntó si sería posible hacer un contrato con ellos para correr bajo su patrocinio. A finales de 2018 hablamos y llegamos a un acuerdo. Él me dijo que tenía que ir a vivir a Murcia, me buscaron casa y allí me trasladé a Cartagena, donde sigo hoy en día y además con mi familia, a la que pude traer el año pasado. Aquel 2018 también se empezó a mover de nuevo lo de mi expediente, ya que no era normal no haber tenido una respuesta y se inició una campaña "Zaid se queda" que apoyó muchísima gente en redes sociales, medios de comunicación etc. EL 99 por cien de los españoles que he conocido me han ayudado muchísimo desde que llegué aquí y aquella campaña fue la culminación. El 30 de diciembre llegó mi nacionalidad española por fin".

Aquel traslado de residencia le llevó a federarse con la Federación de Atletismo de la Región de Murcia y por ello participar en el primer campeonato de España de Trail por Federaciones. "Gané aquella carrera del Valle Trail en Ceheguín, y para mí fue muy importante, porque además tuve que correr fuera de concurso, ya que la selección ya estaba hecha cuando yo me federé y me llevaron a correr aunque no podía puntuar para el equipo. De aquella época tengo que mencionar a Juanma Molina, que era nuestro presidente de la federación y me ayudó mucho para que me integrara con ellos y pudiera competir después con la selección española. Me dio mucha rabia no dar puntos a Murcia por lo bien que se portaron conmigo, pero estuve muy feliz de ganar esa carrera, siendo un campeonato de España, fue algo impagable para mí en ese momento". El campeón había empezado a trabajar con su entrenador Rogelio Macías unos meses antes.

"He estado toda la vida sin entrenador y desde 2019 empecé a entrenar con Rogelio Macías por lo que yo creo que, aunque voy cumpliendo años, he mejorado cosas en mis entrenamientos y por tanto creo que puedo seguir mejorando el rendimiento. Rogelio era profesor de educación física en un pueblo al lado del mío en Andalucía y él iba con la selección andaluza de trail running por aquel entonces, así le conocí. Me parecía un tío serio y por eso hable con él. Me ha cambiado cosas en mi forma de entrenar, sobre todo a la hora de trabajar la subida. Lo más importante es que antes competía todos los fines de semana y eso ha cambiado radicalmente con Rogelio, él me dijo que si entrenaba con él tenía que aceptar ciertas cosas y lo de competir mucho menos, era una de ellas. Otra cosa importante que le dije al empezar, es que yo no quería entrenar muchas horas, soy más de calidad que de cantidad y así hacemos".

Primera victoria en el Campeonato de España por Federaciones y selección española
Aquel resultado del Nacional por Federaciones le daba la posibilidad de correr el Campeonato del Mundo previsto para ese año en Portugal. Eso motivó mucho a Zaid, aunque aquel evento en Miranda do Corvo no fue de buen recuerdo para él: "Me tocó vivir una mala carrera, aún no sé qué me pasó, quizá la emoción de debutar con la selección, la presión, no sé, era algo nuevo para mí. Estaba entrenando muy fuerte, pero corrí muy mal. Puede que el Ramadán también influyera, porque lo habíamos acabado una semana antes, y quizá estaba sin muchas reservas, pero bueno, subimos al podio por equipos, gracias a mis compañeros, y así fue mi debut".

Malek ha sido capaz de adaptarse bien a las carreras largas de distancias ultras, aunque no las prepara especialmente. "He corrido ultras con la preparación de una de 45 km más o menos y creo que lo importante es la preparación mental". Pese a todo y ser muy polifacético, Zaid reconoce que en distancias maratón y ultra, de hasta 100 km, incluso ha competido una de 120 km, responde siempre bien. "Respecto al perfil, por ejemplo, el que vamos a tener en el Mundial de Tailandia, con largas subidas y largas bajadas y además acabando bajando, me viene perfecto, ese es un tipo de perfil ideal para mí. Con mucha bajada final, no me da miedo cuánta ventaja me hayan cogido subiendo porque sé que soy capaz de remontar".

Por último, analizamos con él su buena actuación en el pasado Europeo Off Road de La Palma, en la que hasta el km 38 marchó en cabeza y nos hizo soñar con la medalla de oro. "Fue una carrera muy emocional para mí, luché bien, pero cuando me descolgué tenía un problema en el estómago y no podía seguir ese ritmo, aun así, entrar quinto y primer español, fue un puntazo". De hecho, aquel buen puesto le valió la clasificación para el Mundial que ahora se acerca. Y aunque Zaid no nos lo comenta, damos fe, porque lo vivimos junto a él y al resto de atletas de la selección española: Zaid Ait Malek es un auténtico ídolo de masas en El Paso. Allí ganó hace unos años su Reventón Trail y la gente le reconocía durante el Europeo por la calle los días previos y post al campeonato y creánme que quién más quién menos, le paraba para saludarle y hacerse una foto con él. En esto influye su imagen inconfundible, con su poblada melena visible a distancia, un pelo largo que se dejó en 2018 para donarlo a una organización solidaria "Mechones Solidarios" que ayuda de esta manera a quienes sufren la pérdida de cabello por el tratamiento contra el cáncer, y desde entonces, y tras cortarlo, lo ha mantenido largo, teniendo como decimos una imagen inconfundible y genuina.

Nuestro hombre acaba de tener su segunda hija, Ifra, ya tenía un niño, Elhousseine, que en diciembre hará seis años. Está casado con Aicha desde 2013 y peleó por traerla a España desde 2016, algo que consiguió en 2021, cuando pudieron venirse ella y su hijo. "Estamos todos en España, por fin la vida nos trata bien, juntos con la nacionalidad, yo con contrato de trabajo…"

Su deseo para el Mundial de primeros de noviembre en Tailandia es muy claro: "Que no nos pase nada raro y podamos darlo todo ese día, tenemos un equipazo y espero que lo podamos demostrar", señala un atleta que está realizando una preparación para el Mundial similar a la que tuvo para el Europeo, y que hace poco más de una semana ganó el Cartagena Trail de 34 km, su último test antes del Campeonato del Mundo.